Voy a ampliar un poco más la información aportada por Juan Antonio Cabezas sobre éste Embalse.
El de Salime, es el tercer Embalse sobre el río Navia. El Doiras, inaugurado en 1.934, con una capacidad de 119 Hm3 y una superficie de 347 Ha, se encuentra a 22 kilómetros río abajo. Y el Arbón, inaugurado en 1.967, con una capacidad de 38´20 Hm3 y una superficie de 270 Ha, se encuentra a solo 12 kilómetros de la desembocadura del río en el Mar Cantábrico.
El Muro del Embalse se encuentra en la confluencia de los Concejos de Pesoz, Allande y Grandas de Salime, mientras que las aguas embalsadas ocupan terrenos de los Concejos de Grandas de Salime e Ibras (en Asturias) y de Negreira de Muñiz (en Lugo, Galicia).
En el año 1.940, Narciso Hernández Vaquero (1.866 - 1.964), Ayudante de Obras Públicas, Presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Oviedo y fundador de la Empresa Hidroeléctrica del Cantábrico, inicia el proyecto de construcción del Embalse de Salime.
Finalizada la Segunda Guerra Mundial, su hijo, el arquitecto y pintor Joaquín Vaquero Palacios (1.900 - 1.998), casado con la salvadoreña Rosa Turcios Darío (sobrina del poeta Rubén Darío), completa y termina el proyecto.
Para costear la obra de construcción, las Empresas Hidroeléctrica del Cantábrico S.A. y Electra de Viesgo S.A., constituyeron en 1.945, a partes iguales, la Compañía “Saltos del Navia en Comunidad”.
Los primeros trabajos de preparación comenzaron en marzo de 1.946 con la construcción de un camino de tres kilómetros (para poder acceder desde lo alto de la ladera hasta el lecho del río) salvando un desnivel de más de 500 metros, para desecar el lecho del río donde se iba a levantar la presa. Para ello se desvió el curso del río Navia, excavándose un túnel de 650 metros de longitud y algo más de 20 metros de sección y revistiéndose de hormigón (fue necesario remover más de 25.000 m3 de roca y tierra). Después se construyeron 40 kilómetros de carreteras, entre ellos el tramo San Esteban de los Buitres - Pelorde, para poder acercar la obra hasta la costa, en un pequeño puerto creado en El Espín, frente al muelle de Navia.
La energía eléctrica necesaria para las instalaciones se hizo con un tendido de 22 kilómetros de largo y 30.000 voltios, que mediante transformadores y tras 22 kilómetros más de cables, reducían la corriente a 500 y 220v que alimentaban 550 motores, cuya potencia total superaba los 7.500 caballos de vapor y cuyo consumo diario, estaba estimado en 50.000 Kw.
Las comunicaciones, se realizaron primeramente vía emisora y posteriormente, telefónica. Se instaló una línea que enlazaba la obra con Navia, con una estación intermedia en Boal. La obra contaba con 60 teléfonos repartidos por las instalaciones.
Para el transporte de material, se había pensado inicialmente en 100 camiones de 10 toneladas con los que transportar el material y maquinaria desde el puerto de Navia, pero finalmente (debido a las deficiencias de la carretera) se optó por un teleférico que comunicara directamente el muelle de desembarco (situado en El Espín - Coaña) con las obras del Salto y que se construyó en 1.948.
El recorrido del teleférico era de 35´5 kilómetros, salvando un desnivel de 500 metros entre el muelle y el lugar de las obras. Fue fabricado por 2 empresas, una italiana (Ceretti e Tanfani S.A. de Milán) y otra española (Nueva Montaña Quijano S.A.) Tenía 8 estaciones: de salida, de llegada y 6 intermedias (4 de ellas, motrices). En su día, fue el teleférico más grande de España y el más importante de Europa. El peso total del teleférico era de 960 toneladas. Tenía 650 vagonetas en suspensión y 50 de repuesto de 500 kilogramos de carga cada una. Su velocidad era de 12 kilómetros/hora y podían transportar 35 toneladas/hora de material: las vagonetas tardaban 3 horas cubrir la totalidad del recorrido. El cableado el teleférico se sustentaba en 320 apoyos, con unos vanos que iban desde los 25 a los 1.250 metros de longitud.
El transporte terrestre, quedó reducido a 10 turismos, 1 ómnibus, 11 camiones de 6 toneladas, 5 camiones de 10 toneladas, 4 camiones de 15 toneladas y un Dyamon de 250 cv que podía transportar 60 toneladas. En total, los camiones movían 40.000 toneladas al año, con un total aproximado de 300.000 kilómetros recorridos anualmente.
Los silos construidos para el árido, tenían una capacidad de 3.500 toneladas.
Para la fabricación del hormigón, contaban con un secadero de clinker, molinos, bomba Fuller (para su bombeado a la obra) y silos de cemento de 1.500 toneladas cada uno.
Los molinos y el secadero fueron instalados por la Empresa danesa Smidth y las bombas Fuller, por la Sociedad Española Constantin S.L de San Sebastián.
Se excavó también una cantera para obtener áridos gruesos con los que fabricar el hormigón, situada en un macizo rocoso al NO de la obra, distante unos 700 metros de las instalaciones de trituración. La maquinaria fue proporcionada por la Empresa ICON (Investigaciones de la Construcción S.A.). La cantera tenía una producción media diaria de 3.200 toneladas. Las instalaciones contaban con 2 laboratorios, uno de cemento y otro de hormigón. Los áridos finos se obtenían del cauce del río Navia.
Para albergar a los más de 3.500 obreros que trabajaron en la obra, se construyeron 4 poblados: La Paicega, El Campín, Eritaña y Vista Alegre. Que contaban con pabellones de empleados, economato, panadería, peluquería, cantina, cuartel, escuelas mixtas y de aprendices, iglesia, salón de cine y chalets para los altos cargos. En Grandas de Salime se construyó la “Casa de Dirección”, para residencia de los Ingenieros.
Las obras de construcción del Embalse y la Central Hidroeléctrica, fueron adjudicadas a la empresa Agromán S.A., que tuvo que retirar 303.000 metros cúbicos de tierra para empezar la edificación.
Se levantó una presa de gravedad de planta curva con taludes del 5% (aguas arriba) y del 72% (aguas abajo), con un radio de 400 metros en su coronación y una altura sobre cimientos de 132 metros. Su espesor en la base es de 92´40 metros y en la coronaciòn de 8 metros. Su masa es de 80.000 toneladas. En la parte superior tiene una longitud de 250 metros, y en su centro se encuentran los 4 aliviaderos, con compuertas de 12 metros de largo por 7 metros de alto, cada una; con una capacidad de desagüe de 2.000 m3 por segundo.
La Central Hidroeléctrica está situada debajo del aliviadero del Embalse. Tiene una longitud de 69 metros y una anchura de 13´6 metros en planta, sobre los que van cimentados los plintos de apoyo de las máquinas. Se montaron 4 grupos generadores de 32 MW cada uno, que entregan la energía a una tensión de 11.000 voltios. Las turbinas de reacción son tipo "Francis vertical" (desarrolladas por el ingeniero norteamericano, James Bicheno Francis (1.815 - 1.892): turbomáquina motora a reacciòn de flujo mixto) alimentadas por tuberías de 2´5 metros de diámetro, capaces de evacuar un caudal de 153 m3/s. Eran de fabricación británica, de la Empresa “English Electric” (fundada en diciembre de 1.918), fabricante de las locomotoras más potentes de Inglaterra (a fecha de 1.945) de 3600 cv que además fueron fabricadas para la RENFE y de los aviones de propulsión a chorro "Canberra" (B-57) y “El Rayo”.
La columna de agua tiene 112 metros de altura, con un caudal por turbina de 303 litros por segundo. La potencia de cada turbina es de 44.000 HP.
La Central hoy es controlada automáticamente desde Oviedo y pertenece a la Sociedad “Saltos del Navia, C.B.”, participada al 50% por HC Energía y Endesa Generación.
La fachada por la que se accede al interior de la Central está ornamentada por 12 bajorrelieves de hormigón a base de un árido de mármol rojo de Alicante. El tamaño de las figuras es de 3 metros y simbolizan el proceso de producción de la energía eléctrica.
El arquitecto Joaquín Vaquero Palacios y su hijo, Joaquín Vaquero Turcios (1.933 2.010), dotaron a las instalaciones de diversos elementos ornamentales y decorativos. Joaquín (padre) hizo la fachada principal de la Galería por la que se accede al interior de la Central. En el interior de la central diseñó numerosos elementos, como la magnífica escalera interior de diseño modernista o la balconada volada sobre inmensas ménsulas de hormigón desde la que se domina la Sala de Turbinas. Joaquín (hijo) diseñó el Mirador colgante en la margen derecha del río, conocido como “La Boca de la Ballena”, desde el que se puede admirar todo el conjunto, la imagen de la Virgen de la Luz (que se encuentra en el talud entre el Mirador y El Muro) y también pintó los murales que adornan la Sala de Turbinas. El de mayor tamaño (60 metros de largo por 5 metros de alto) representa todo el proceso constructivo de la Central. En el proyecto de Joaquín (hijo) aparecían pintados los rostros de Pablo Ruiz Picasso (1.881 - 1.973), de Albert Einstein (1.879 - 1.955), de Max Planck (1.858 - 1.947) y de Sigmund Freud (1.856 - 1.939), pero la censura de la época truncó esa idea. Nota: en 2.001, con motivo de la restauración de los murales, Joaquín decidió rescatar esa vieja idea y pintó los rostros en las ménsulas de la Sala de Turbinas.
El 23 de septiembre de 1.953, se procedió al taponamiento del túnel de desviación del río y comenzó a llenarse el Embalse. Dos meses después, el 23 de noviembre, el Embalse ya había llegado al nivel del aliviadero provisional, comenzando a rebosar.
El 19 de diciembre de 1.953 se acopló a la red eléctrica nacional y comenzó a producir energía el primer grupo generador (el actual número 4). Las otras lo hicieron en junio y diciembre de 1.954, y el cuarto y último el 31 de marzo de 1.955.
El Embalse de Salime fue inaugurado, oficialmente, el 24 de agosto de 1.955.
El Embalse cuenta con una capacidad para 265´60 millones de metros cúbicos de agua en un recorrido de 30 kilómetros y una superficie de 685 Ha. Se calculó que se llenaría a ritmo normal en 65 días y en máxima riada registrada hasta la fecha de su fabricación, en 74 horas. El coste de la obra del Embalse fue de unos 800 millones de pesetas. Se inundaron 1.995 fincas: con más de 3.000 parcelas, 25.360 árboles maderables, 13.800 frutales y 14.051 pies de vid. Se expropiaron 685 hectáreas de terreno, con un costo en indemnizaciones por las expropiaciones de 17 millones de pesetas. Alrededor de 300 obreros, fallecieron debido a las precarias condiciones de trabajo y la escasez de alimentos. Quedaron sepultados bajo las aguas del embalse: ocho puentes, cinco iglesias, varias capillas y cuatro cementerios, además de los pueblos de Subsalime, Salime, San Feliz, Salcedo, Duade, Veiga Grande, Saborín y La Quintana (pertenecientes a Asturias) y Barqueiría, Riodeporto, Villaugin, Barcela y San Pedro de Ernes (pertenecientes a la provincia gallega de Lugo).
Datos curiosos:
El Muro del Embalse y el edificio de la Central Hidroeléctrica pesan 1.680 millones de kilogramos.
La altura de la presa del Embalse es de 132 metros, o sea, 42 metros más que la Torre de la Catedral de Oviedo (incluída la cruz de su remate).
Se calcula que los sacos de cemento necesarios para construir (solamente la presa y la central) cubrirían el perímetro de Asturias con un parapeto de 4 sacos superpuestos y aún quedarían sacos para rodear la ciudad de Oviedo con un parapeto de doble fila de 6 sacos.
Para transportar todo el hormigón en camiones de 10 toneladas, serían necesarios 108.000 camiones, que puestos en fila, ocuparían 5.000 kilómetros.
Con la construcción del Embalse de Salime se cortó el antiguo trazado de la carretera AS-34 (Berducedo - Grandas de Salime), lo que motivó la construcción de la actual carretera AS-14, a través de la parte superior de El Muro. La Empresa propietaria de la Central quedó obligada a mantener un servicio gratuito de barcas (2 lanchas, de nombre “Pontigón” y “Castiadelo”) que cruzaba el Embalse entre los puntos en que las aguas cubrían la antigua carretera.
La presa de Salime fue la de mayor volumen y altura de España y la segunda de Europa, sólo superada ligeramente por la francesa de Bort-les-Orgues (1.955) en el río Dordoña. Además del aprovechamiento hidroeléctrico, también es utilizado en actividades lúdicas y recreativas.
Para poder visitar el “Patrimonio Industrial del Embalse de Salime”, hay que concertar la visita, llamando al teléfono 985 220894 / 95, con al menos 15 días de antelación ó a través del correo electrónico [email protected]. La visita es los jueves laborables (no festivos) a las 11 A.M.
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